Comité de Cooperación para la Paz

 

La historia de la Vicaría de la Solidaridad comienza a escribirse en Chile el 11 de septiembre de 1973, con el golpe de Estado al gobierno constitucional del Presidente Salvador Allende. Esta se inicia con la creación del Comité de Cooperación para la Paz en Chile, (COPACHI), mediante un decreto arzobispal firmado por el Cardenal de la Iglesia Católica y Arzobispo de Santiago, Monseñor Raúl Silva Henríquez, fechado el 9 de octubre de 1973, que da origen a esta "comisión especial para atender a los chilenos que, a consecuencia de los últimos acontecimientos políticos, se encuentren en grave necesidad económica o personal".

El Comité fue un organismo de carácter ecuménico en el que participaron la Iglesia Católica, las iglesias Evangélica Luterana en Chile, Metodista, Metodista Pentecostal, Presbiteriana, Bautista, Ortodoxa y el Gran Rabino de la Comunidad Israelita de Chile, que tenía como misión prestar asistencia legal y social a las víctimas de las gravísimas violaciones a los Derechos Humanos que se produjeron a raíz del Golpe Militar del 11 de Septiembre de 1973.

El trabajo realizado en el COPACHI fue respondiendo a las necesidades y urgencias que se iban presentando: resguardar la vida de los perseguidos, procurar la libertad de los detenidos, atender a los cesantes que día a día iban aumentando. Nacen así sus distintos departamentos: Jurídico, Laboral, Campesino, Universitario, de Reubicación, y Departamento de Zonas, entre otros; junto a las distintas organizaciones de familiares de detenidos, entre estas la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos.

La historia, sin embargo, trató de ser interrumpida. A poco andar, y conocerse el trabajo que el Comité realizaba, la Junta de Gobierno, no tardó en catalogarlo parte del bando enemigo. Asimismo, la labor desempeñada por el Obispo luterano, Helmut Frenz, quien en ese entonces era co presidente, fue cuestionada por una parte de sus fieles, en una clara manifestación de profunda división de la Iglesia Luterana en Chile. Ante las críticas, Frenz viajó a Alemania para informar la difícil situación que vivía tanto el país como su iglesia. Sin embargo, al intentar retornar de su viaje, en octubre de 1975, su ingreso fue prohibido por el gobierno.

El 11 de noviembre de 1975 el general de Ejército y Presidente de la República, Augusto Pinochet le envía al Cardenal Raúl Silva Henríquez una carta exigiéndole la disolución del Comité de Cooperación para la Paz en Chile. Días más tarde, el Cardenal le responde que las distintas Iglesias que conforman el Comité han analizado su planteamiento y acordado aceptar su exigencia de cesar sus actividades. No obstante, todas asumieron el compromiso de colaborar y respaldar las decisiones de la Iglesia Católica.

A la fecha, las distintas Iglesias que conformaban el Comité se encontraban debilitadas. Es necesario tener en cuenta que sólo la Iglesia Católica era considerada por el Estado como institución de derecho público, y toda otra denominación religiosa de derecho privado, requería reconocimiento estatal de su personería jurídica, reconocimiento que el Estado podía quitar; asimismo, otros jefes de iglesias eran extranjeros, de modo que la situación legal debilitaba tanto a personas como organizaciones.

Además, habían sido detenidos varios de los trabajadores del Comité, se encontraban encarcelados los sacerdotes P. Gerald Whelan C.S.C, P. Rafael Maroto, P. Fernando Salas S.J y el P. Patricio Cariola J., miembro de su directorio, por ayudar a dirigentes del MIR que huían de un enfrentamiento con la DINA en Malloco, uno de los cuales, junto a su esposa, se encontraba asilado en la Nunciatura Apostólica.

El Cardenal Silva Henríquez siguiendo su mandato evangélico decide cerrar el COPACHI y crear la Vicaría de la Solidaridad del Arzobispado de Santiago, cuyo marco doctrinal inspirador estuvo constituido por la Carta Pastoral sobre la Solidaridad entregada por él mismo, el 25 de julio de 1975. Cada una de las iglesias debió continuar el trabajo por separado.